En la madrugada del domingo, la Policía de Neuquén rescató a un bebé que había sido dejado solo en una camioneta mientras sus padres disfrutaban de la noche en un boliche de Centenario. Vecinos alertaron al 911 al notar al pequeño dentro del vehículo con las puertas abiertas. Afortunadamente, el bebé estaba dormido y abrigado con una manta, pero la situación generó indignación y preocupación en la comunidad.
La madre del menor, quien presentaba signos de ebriedad, llegó al lugar minutos después de la intervención policial. El bebé fue trasladado al Hospital Natalio Burd para chequeos preventivos, confirmándose que se encontraba en buen estado de salud. A pesar de esto, la Defensoría del Niño y el Adolescente junto al Centro Ayutún han tomado cartas en el asunto para evaluar las condiciones del hogar del menor. Hasta el momento, no se han informado medidas oficiales contra los padres.
Un patrón de negligencia
En marzo, Neuquén ya había sido escenario de una tragedia cuando un niño de tres años murió tras ser olvidado durante seis horas en un vehículo. Estos episodios interpelan profundamente a la comunidad y resaltan la importancia de medidas preventivas para evitar que estos errores terminen en desenlaces fatales.