Impactante escándalo sacude la política salteña. El concejal Pablo López, referente de La Libertad Avanza, renunció a su banca tras la difusión de un audio en el que su expareja lo denuncia por abusos sexuales, violencia física y psicológica. La víctima, también integrante del espacio libertario, relató hechos que habrían ocurrido en su casa y durante un viaje a Brasil.
“Me agarró del cabello, me golpeó contra la pared, me arrastró”, confiesa la mujer. En otro testimonio estremecedor, asegura que López le exigía sexo a cambio de lo que había gastado en el viaje. También le retenía parte de su sueldo como asesora: de $500.000, debía devolverle $200.000. El audio que desató el escándalo se viralizó rápidamente: “Por cada chupada de p... te descuento $10.000”, se escucha decir al edil.
Pero el derrumbe libertario no termina ahí. El jefe de ANSES Metán, Cristian Achaval, denunció penalmente a la diputada nacional Emilia Orozco, a Carlos Zapata y al apoderado Ricardo Ortega. ¿El motivo? Le exigían parte de su sueldo y datos confidenciales del sistema ANSES para hacer campaña política.
La prueba es un audio demoledor donde Ortega habla de controlar aportes y recibir el dinero en mano. Achaval denunció sentirse amenazado, acosado y presionado a entregar información personal de los ciudadanos. El caso ya está en manos de la justicia, bajo cargos gravísimos como extorsión y abuso de autoridad.
Si la Justicia avanza, esta red de abusos, extorsiones y violencias podría terminar de desmoronar al partido en Salta. Y la pregunta que queda en el aire es clara: ¿cuántas víctimas más hay detrás del telón libertario?. Con información del 10 TV