Una joven salteña, Laura Alvarez, compartió una emotiva historia de agradecimiento a un desconocido que, sin saberlo, le salvó la vida en un momento de desesperación. Según relata, el sábado 18 de este mes, Laura tuvo un día particularmente difícil. Al salir de su trabajo alrededor de las 22 horas, recibió una noticia que la sumió en un profundo estado de angustia. Decidió ir a la parada del colectivo 6B, en la intersección de las calles Santiago del Estero y Mitre, donde comenzó a sentirse completamente perdida, con pensamientos suicidas que la llevaron a sentarse en el escalón de una casa cercana.
"Estaba llorando y tratando de que la gente no notara lo mal que me sentía", comenta Laura. En ese momento, un joven llamado Gastón se acercó a ella, vestido con un traje, quien, al ver su angustia, le ofreció un chocolate Block. Tras preguntarle si todo estaba bien, Laura comenzó a desahogarse, y Gastón se ofreció a escucharla. "Me preguntó si quería contarle lo que había pasado, y aunque estaba en shock, empecé a llorar y él solo me acariciaba la espalda. Me calmé y le conté lo que sucedía", relata Laura.
Gastón, según Laura, le compartió que acababa de salir de la Iglesia y que le gustaba leer la liturgia, a pesar de no ser católico. Antes de irse, citó un pasaje de la Biblia que Laura no recuerda, pero que le dejó una profunda huella. Durante ese breve encuentro, la joven pudo aliviar sus pensamientos negativos y, finalmente, fue recogida por un amigo en moto.
"Quiero encontrar a Gastón para agradecerle, porque sin darse cuenta me salvó la vida. Yo pensaba en tirarme debajo de un auto, pero gracias a él, esos pensamientos se fueron", expresó emocionada a Con Criterio Salta.
Laura pide ahora a quienes puedan conocer a este joven, que la ayuden a encontrarlo. "Si comparten esta publicación, sería una gran acción para ayudarme a dar las gracias", concluyó.