La diputada Marcela Pagano estalló en plena sesión del Congreso este miércoles, acusando a Martín Menem, presidente de la Cámara de Diputados, de actuar de forma autoritaria y de presionar a periodistas. Con un megáfono en mano, Pagano exigió que se difundiera un audio en el que, según ella, Menem incita a sus aliados a crear caos. "Interrumpir al orador es de fascista", lanzó, en una escena que rápidamente se viralizó en redes sociales.
La tensión no es nueva: Pagano lleva meses luchando por ser reconocida como presidenta de la Comisión de Juicio Político. A pesar de contar con un acta firmada por 17 legisladores, incluidos algunos del oficialismo, Menem ha ignorado su designación. "Tendrá algo que esconder", afirmó Pagano, sugiriendo que el presidente de la Cámara teme las consecuencias de un juicio político.
En medio del conflicto, Pagano también denunció presiones a periodistas por difundir audios relacionados con el caso. "Ningún periodista va a perder el trabajo por reproducir algo que es verdad", declaró, defendiendo la libertad de prensa y advirtiendo sobre posibles represalias contra su familia.
El audio en cuestión, atribuido a Menem, agrega más leña al fuego. En él, se escucha una voz que insta a los diputados a "gritar y putear" en lugar de mantener un tono pacífico. Pagano lo citó en plena sesión, desafiando a Menem a que lo difunda públicamente. "Ponga el audio, Martín Menem. Yo no le tengo miedo", gritó.
Este enfrentamiento no solo expone las internas del oficialismo, sino que también pone en evidencia la fragilidad de las instituciones. Con una comisión clave paralizada y acusaciones de autoritarismo, la pregunta es: ¿hasta dónde llegará esta crisis política? Expertos advierten que, de no resolverse, podría debilitar aún más la ya frágil estabilidad del gobierno.