Trece años después de su desaparición, el caso de María Cash cobra un nuevo impulso con intensivos rastrillajes que abarcan 80 kilómetros de terreno en la provincia de Salta. Las autoridades concentran sus esfuerzos en el trayecto entre la ermita de la Difunta Correa y Joaquín V. González, siguiendo la ruta que habría tomado el principal sospechoso, el camionero Héctor Romero.
El Sistema Federal de Búsqueda de Personas (SIFEBU), junto con Gendarmería Nacional y equipos locales del Ministerio Público, han establecido 20 puntos críticos de búsqueda divididos en tres sectores. La geolocalización de estos puntos se dirige principalmente por las antenas que captaron el teléfono del sospechoso, quien actualmente cumple prisión domiciliaria debido a problemas de salud.
Un testimonio crucial ha surgido recientemente: un baqueano de la zona afirma haber encontrado restos óseos que podrían pertenecer a la joven diseñadora. Este hallazgo ha llevado a la fiscalía a solicitar nuevos allanamientos, convirtiendo al lugareño en una pieza fundamental para la investigación.
La última imagen de María Cash fue captada el 8 de julio de 2011 en la Ruta 34, cerca de Salta, cuando viajaba desde Buenos Aires hacia Jujuy con planes de establecer un taller de diseño. Desde entonces, su desaparición se ha convertido en uno de los casos más resonantes del país, manteniendo en vilo a su familia durante más de una década.
El fiscal Eduardo Villalba ha confirmado que Romero, imputado por homicidio agravado por alevosía, será trasladado próximamente al lugar para precisar detalles de sus declaraciones, las cuales hasta ahora han presentado tres versiones contradictorias sobre el último desfile de María Cash.