Una floristería local fue testigo de una curiosa situación que dejó a más de uno con preguntas. Dos hombres, en momentos diferentes, llegaron a pedir un ramo de flores para la misma mujer. El cadete de la tienda notó algo peculiar: ambos ramos iban dirigidos a la misma dirección y, curiosamente, al mismo número de teléfono. Al llegar a la dirección, la misma mujer recibió los dos arreglos florales, uno a nombre de Lorena y otro a nombre de Laura. ¿Error de ortografía, identidad secreta o simplemente una salteña con mucho talento para el amor?
La empleada de la floristería, conocedora de secretos amorosos, aseguró que este tipo de situaciones no son tan raras como parecen. "Soy ciega, sorda y muda en estos casos", comentó, refiriéndose a su política de discreción absoluta. "Aparentemente, es una salteña con dos novios", comentó entre risas, refiriéndose al origen de la misteriosa mujer. Además, la empleada reveló que su discreción ha salvado más de un matrimonio.
Mientras los dos ramos descansaban en la mesa de la afortunada (o quizás no tanto), la pregunta quedó en el aire: ¿qué pasará cuando los dos hombres descubran que no son los únicos en la vida de Lorena... o Laura? Y, de ser así, ¿cómo manejará la situación? Por ahora, la empleada prefiere no involucrarse más allá de lo necesario, aunque no pudo evitar reflexionar: "Espero que nadie se olvide este 14 de febrero, pero también espero que no manden dos ramos a la misma persona". Un recordatorio de que, en el amor, las sorpresas están a la orden del día.