Un vecino denunció un escándalo en pleno viaje: dos jóvenes compraron droga dentro de un ómnibus de la empresa Saeta, en Cerrillos. El vendedor actuó con total impunidad, a metros de un policía y un penitenciario, quienes habrían ignorado la situación. El hecho ocurrió en pleno Valle de Lerma, dejando en evidencia la audacia del microtráfico.
"Nunca vi algo así en mis 50 años", declaró el testigo, indignado. Los involucrados, presuntamente de La Isla (Cerrillos), operaron sin temor, frente a decenas de pasajeros. Lo más grave: la droga se negoció como si fuera un producto común, normalizando el delito en plena vía pública.
El caso revela la alarmante naturalización del narcotráfico en Salta. "Todos saben dónde se vende, pero ya nadie reacciona", advirtió el denunciante. La falta de acción de las autoridades y la indiferencia social permiten que estas situaciones se repitan, incluso en espacios tan cotidianos como el transporte público.