Cuando la paz se rompió en Metán, lo que menos se esperaba es que dos facciones de la UOCRA decidan desatar una batalla campal en la Casa de la Cultura. ¿El motivo? Un sencillo sorteo de puestos de trabajo. Sin embargo, lo que comenzó como una actividad aparentemente común terminó con destrozos por doquier: tanto en el edificio como en las calles cercanas. Como si fuera que el caos se apoderó del lugar, y, al parecer, la violencia llegó para quedarse... pero al menos nadie salió herido, ¿o no?
Ante semejante espectáculo, el diputado Sebastián Otero no se quedó de brazos cruzados. Enviando una carta documento a Gerardo Alberto Martínez, secretario general de la UOCRA, Otero dejó claro que no iba a permitir que este tipo de enfrentamientos siguieran ocurriendo en su querido Departamento de Metán. "No vamos a permitir más este tipo de acciones violentas", sentenció, mientras se aseguraba de que la central gremial tomara conocimiento de lo ocurrido. Parece que la política de 'mano dura' ahora también se aplica a los gremios, o al menos eso es lo que espera Otero.
Mientras tanto, el intendente de Metán, José María Issa, también levantó la voz, pidiendo reparaciones inmediatas en los daños causados. Claro, después del "festival" de destrozos, algunos arreglos son más que necesarios. Pero, por si las dudas, se comprometió a garantizar la seguridad y evitar que estos "episodios" se repitan. Afortunadamente, según el diputado, la situación no era más grave. Aunque, sin dudas, Metán podría haber vivido otro episodio más lamentable todavía.