Ayer sábado por la mañana, minutos antes de la 06:00 horas, cuando el sol apenas asomaba sus primeros rayos, en la ciudad de Salta se desarrolló una escena digna de ser contada. En calle Catamarca al 700, donde los agentes de la División Ejidos Municipales llevaban adelante un control vial rutinario, fiscalizó un automóvil cuyos ocupantes presentaban signos de haber ingerido bebidas alcohólicas.

Mientras los oficiales procedían a constatar la situación del sospechoso, sus ojos expertos no pasaron por alto un detalle peculiar: una cantidad llamativa de celulares en el interior del vehículo. Fue entonces cuando las alarmas se encendieron y la escena comenzó a tomar un giro inesperado.
Ante la presunción de que podría tratarse de elementos procedentes de hechos ilícitos, los agentes solicitaron a los involucrados documentación que acreditara la procedencia de los mismos. Tras constar con la Dirección Análisis de Seguridad que algunos de los aparatos registraban denuncias por robo bajo la modalidad motochorros, los elementos fueron secuestrados y las dos personas demoradas.
El conductor, un joven de 19 años, además de ser sorprendido con los celulares robados, fue infraccionado por la Ley N° 7846 de Tolerancia Cero al arrojar resultado positivo en el test de alcoholemia. Su vehículo también fue retenido. Su cómplice, una mujer de 37 años, compartió el mismo destino.