El Senado enfrenta una nueva tormenta política por el posible aumento de las dietas de sus miembros, que podrían superar los $9 millones mensuales desde mayo. La vicepresidenta Victoria Villarruel responsabiliza a los senadores, quienes en 2023 aprobaron el incremento automático atado a paritarias. El tema se debatirá el 3 de abril, mientras crece la presión social por el contraste con la crisis económica.
Los legisladores justifican el aumento citando el 35% de descuento por Ganancias, los costos de mantener viviendas en Buenos Aires y sus provincias, y la "trascendencia de su cargo". Solo Luis Juez (Pro) rechaza abiertamente el ajuste, proponiendo desvincular las dietas de las paritarias, una postura que le ha valido críticas internas y hasta un cruce con Villarruel.
El conflicto se remonta a abril de 2023, cuando los senadores fijaron sus ingresos en 4,000 módulos (equivalente a $7.3 millones iniciales). Tras el escándalo, congelaron las dietas hasta diciembre, pero la medida solo pospuso el aumento. Si no hay una nueva resolución antes de abril, el incremento será automático, reavivando el malestar social en un contexto de ajuste.